Una educación con vida

Para la Mesa de Shabat, parashat Vaetjanan

“Mamá, mamá, ¿por qué uno más uno es dos?”, “Papá, ¿a donde se fue el sol?”, ¿Mamá, mamá, por qué no puedo comer tierra? ¿Y por qué? ¿Y por qué?”. Frases conocidas para cualquier padre que atravesó la etapa en la cual el hijo empezó a descubrir cosas nuevas y necesita respuestas para poder llenar su hambre de conocimiento.

¿Cuál es nuestra obligación como padres? Darles las respuestas a nuestros hijos.
Desde la corta edad hasta que ellos crezcan, ellos vienen a nosotros en busca de respuestas y nosotros, como personas con más experiencia y sabiduría, debemos proveer respuestas satisfactorias. Ellos no solamente ven en nosotros una fuente de conocimiento, un almacén de respuestas, sino que confían en nuestra palabra. A tal punto es así, que cuando se encuentran dos amigos en el colegio y uno le pregunta al otro de dónde sacó que el sol se oculta y vuelve a salir al otro día, este contesta “Mi papá me lo dijo”. Para nuestros hijos, nuestra palabra es sagrada. Lo que los padres le dicen a sus hijos no son meras palabras sin sentido o palabras de más. Cada cosa que les decimos, ellos las graban en sus mentes y para ellos cada palabra nuestra pasa a ser parte de su “Tora” individual.

La Torá en Haiku: Devarim

POR: ED NICKOW


Deuteronomio historias se volvieron a contar con algunos cambios realizados
El último libro de la Torá es una especie de resumen de lo que ha venido antes. Sin embargo, a menudo parece que en el relato de Moisés, algunos detalles han cambiado.
Al principio de la parashá de esta semana, la historia de los exploradores se relata. Moisés le dice al pueblo que "Todos ustedes se acercaron a mí y me dijo, 'Enviar hombres por delante para explorar la tierra. Que traer de vuelta un informe sobre el camino por delante de nosotros, y las ciudades que vamos a encontrar." (Dt 1 : 22).

Tishá Beav - Un Día de Reflexión

POR EL RABINO DANIEL B. SYME
Tishá Beav significa "nueve de Av" y se refiere a un día tradicional de los judíos de ayuno y luto. Av. corresponde a julio o agosto del año secular. Para algunos, Tishá Beav es el más oscuro de todos los días, un tiempo reservado para el duelo por la destrucción de los antiguos templos de Jerusalén.
Se construyó el primer templo en Jerusalén durante el reinado del rey Salomón (965-925 aC).La Biblia nos dice que no hay herramientas de hierro se utilizan en el trabajo, como el hierro era un material de las armas y la guerra. El templo fue terminado una estructura impresionante.Situado en una montaña de 2.500 metros de altura, tenía patios, un santuario y una sala pequeña llamada el Lugar Santísimo, entró una sola vez al año por el sumo sacerdote. Fue en el templo que el Cohanim (Sacerdotes) ofreció a los antiguos sacrificios en nombre del pueblo.

Un articulo sobre Tisha Be Av

¿Por Tishá Be Av importa hoy
POR LINDSEY COHEN

Con el fin de controlar el mundo a su alrededor, primero debe ser capaz de controlarse a sí mismo.
Cuando todo parece estar fuera de control, a menudo no es lo que está sucediendo fuera de esto es la raíz del problema, pero lo que está sucediendo en el interior.
Este concepto no sólo se aplica a los individuos, sino también a los grupos.
La semana pasada, la primera página de mi periódico en Israel presenta diferentes variaciones del mismo título todos los días.

Tishá Beav


Tishá Beav

Tishá Be Av, observada en el noveno ( Tishá ) del mes hebreo de Av, es un día de duelo por la destrucción de los antiguos templos de Jerusalén. En contraste a las corrientes tradicionales del judaísmo, el judaísmo liberal nunca ha asignado una función religiosa central en el antiguo templo.Por lo tanto, el duelo por la destrucción del Templo no puede ser particularmente significativo para Judios liberales. En los tiempos modernos, Judios entender Tisha Beav como un día para recordar muchas de las tragedias que ha sufrido el pueblo judío a lo largo de la historia.

10 Secretos para un matrimonio maravilloso

¡Asegúrate de apreciar el esfuerzo de tu pareja! Ella es tu alma gemela, la que te está ayudando a perfeccionar tu propia alma...

El matrimonio es la herramienta fundamental en el desarrollo personal. El matrimonio moderno es una unión de un 50-50%, pero el matrimonio Judío lo es de un 100-100%.

La palabra hebrea para matrimonio es "Kidushín", que significa santificar, y tiene como propósito obtener un alto grado de santidad mediante el intercambio íntimo entre la pareja.

Cuando nos acercamos a nuestra pareja, aumentamos nuestra capacidad de acercarnos a Di-s.

El lavado de las manos


Las Mujeres, en Relación con Las Birjot HaTorá - Bendiciones para el Estudio De La Torá
Siman - Artículo - 47 : 13-14
13. Quien madruga , y se levanta antes del amanecer , para estudiar (Torá) , recita la bendición para la Torá - Birkat haTorá , y no precisa repetir las bendiciones cuando va a la sinagoga . Quien madruga , y se levanta antes del amanecer , recitará el orden completo de las bendiciones ( o sea , las bendiciones matutinas - Birjot Hashajar ) 13) excepto la bendición "hanoten lasejvi vináh" (...Quien da a nuestra mente - "el gallo" el discernimiento ) , y la selección de versículos de la Torá , correspondiente a las ofrendas (ovejas del sacrificio) diarias ( vea artículo - Siman 1 - Inciso Se´if 6 ) que se deberá aguardar hasta el amanecer para recitarlas .

Zalman Schachter - Shalomi

Zalman Schachter-M. Shalomi y comúnmente llamado " Reb Zalman "(pr: rǎb) (nacido el 28 de agosto 1924 en Zhovkva , Polonia [ahora Ucrania ]) es considerado uno de los principales fundadores de la Renovación judía movimiento.

Nacido en Polonia en 1924 y creció en Viena , fue internado en los campos de detención en el marco del francés de Vichy y huyó del nazi previamente por venir a los Estados Unidos en 1941. Fue ordenado como un ortodoxo rabino en 1947 dentro del Chabad Lubavitch Hasidic comunidad, mientras que bajo el liderazgo del sexto Rebe de Lubavitch, Iosef Itzjak Schneerson , y sirvió congregaciones Jabad en Massachusetts y Connecticut. Posteriormente, obtuvo una maestría en psicología de la religión en la Universidad de Boston , y un doctorado de la reforma de gestión Hebrew Union College .

Él fue enviado inicialmente a hablar en los campus universitarios por el Rebe de Lubavitch, pero se fue después de experimentar con "el valor sacramental del ácido lisérgico . " , con la consiguiente subida del hippie movimiento en la década de 1960, se alejó del estilo de vida Chabad .

Resumen de la Parasha por el Rabino Peter Tarlow

Shabbat Shalom de la Primera Casa de 

Hillel



Rab Peter Tarlow

Las secciones de la Torah que leemos durante este próximo Shabbat se llaman Matot y Ma'asey (Números 30:2-36:13). En cierta manera estas dos podrían llamarse "secciones acerca de los viajes". No solamente nos dan un repaso de los viajes de los israelitas por el desierto sino también nos relatan sus viajes a través del tiempo. Y, a la vez, como son las dos secciones finales del Libro de Números, nos llevan en un viaje físico, espiritual y ético, todo al mismo tiempo. También para los de nosotros que vivimos en los EE.UU. reflejan el espíritu de nuestro país. Los estadounidenses, como los israelitas, salieron todos de sus tierras de opresión con la esperanza de que fueran a hallar su propia tierra prometida. Como en el narrativo bíblico, también tenemos orgullo de nuestra libertad nacional y en nuestra habilidad para buscar la libertad personal y la prosperidad.
En la misma medida que este libro trata de viajes diferentes por lugares inhóspitos, también vemos este fenómeno en la historia de los EE.UU. La lección para esta semana es que el yermo puede ser un lugar vacío y "lleno" de nada más que lo intangible o puede ser un lugar lleno de acciones que se convierten en realidades concretas. El yermo, el vacío, puede ser un lugar o puede ser una relación interpersonal. ¿Cuántos de nosotros vivimos en desiertos culturales, intelectuales, sociales, o políticos? La parashá actual nos enseña que la salida "del desierto" es mucho más que un viaje físico. Es un viaje hacia la libertad de pensar y de expresarse libremente. En esta manera la gran mayoría de los estadounidenses estaría de acuerdo que han salido de su desierto, de su yermo personal para poder llegar a su tierra prometida.

Una parte apreciable de la cultura norteamericana está construída sobre los principios judíos. Del mundo judío los fundadores de los Estados Unidos tomaron para sí la importancia de la libertad de expresión y de pensamiento. El judaísmo da menos énfasis a las creencias de un ser humano que a sus acciones. Le importa al mundo judío menos las palabras de su feligreses y más sus realizaciones. Estos principios han tenido una gran influencia sobre la historia norteamericana y su papel en el mundo. Es por eso que la Biblia nos ha enseñado la importancia de que nuestros líderes digan la verdad y plantea el concepto de que una sociedad basada en las mentiras es una sociedad vacía, una sociedad que se descompone con las arenas de tiempo.

La cuestión central desde la perspectiva bíblica no es si un gobierno tiene derecho a controlar las conversaciones de sus ciudadanos, no lo tiene si los ciudadanos usan este derecho en una manera razonable y prudente. Pero, ¿y si el derecho a la intimidad se usa de forma repetida y organizada para cometer terribles actos? ¿Derecho a la intimidad de los criminales o el derecho a la vida en paz de toda la comunidad?

Este libro nos dice que la decisión de vivir o no vivir en un yermo está en nuestras manos. ¿Deseamos vivir en un país donde no confiamos en nuestros líderes y acciones o en un país donde las palabras de nuestro líderes son iguales a sus acciones? ¿Queremos la verdad o queremos la manipulación de las palabras? La opción elegida tendrá mucho que ver con el destino del país. Ojala que escojamos con sabiduría.

L'Bidurjem/Para reír

Solamente en los EE.UU tenemos:

Bancos, farmacias y licorerías donde se compra todo sin salir del coche.

Playas de estacionamientos (cocheras) mayores que sus edificios
Adhesivos de parachoques que dicen: ¡Toca el claxon si detestas la contaminación de ruido!'

Un juego llamado "futbol" en el cual se usa principalmente la mano
Gente que cree que la vida humana es tan sagrada que dice que el aborto merece la pena de muerte

Un país donde los "48 estados bajos" están al norte de Hawai y donde Alaska a pesar de estar en el mismo continente no se incluye en con los 48 estados continentales.
Un país donde todos tienen el tiempo para cortar su pasto (segar su césped) enorme y nadie tiene el ocio para cocinar.

Un país donde la gente ve la igualdad humana como algo tan importante que usa la discriminación para crearla.

Universidades conocidas más por sus deportistas que por sus eruditos

Un país que dice que detesta los abogados tanto que solamente los elige a sus cargos públicos

Gasolina que vale mucho menos que el agua y todos quejan del precio de gasolina

Un país laico donde se escribe en todo su dinero: "En Dios confiamos"

Un país donde solamente los ricos van a su trabajo en bicicleta

Uno de los países tecnológicamente más avanzados del mundo con un sistema de medidas más anticuado del mundo

Somos el país de los libres con la tasa de encarcelamiento 2/no más alto del mundo.


Shalom from the Hillel that was, before there was Hillel!

Go to: www.tamuhillel.org for updates

The double Torah sections that we read during the week of July 4th are called Matot and Ma'asey (Numbers 30:2-36:13).  In a sense these two parashiyot may be called "travel-sections".  They not only act as a review of the Israelites' travels through the desert but also through time.  These two final sections of the Book of Numbers take us on a physical journey, a spiritual journey, and an ethical journey.  In a sense they also reflect the American spirit.  Americans, like the people of Israel, left lands of oppression to find their own promised land, and as in the Biblical narrative, we in the US pride ourselves not only on our national freedom but also on our pursuit of liberty and prosperity.

Just as the Book of Numbers is a book about different types of journeys through inhospitable places, so too is the history of the US.  The week's text teaches us then that the wilderness can be an empty place filled only with the intangible or a place filled with actions that become concrete realities. The wilderness can be one of place, or one of relationships.   How many of us live in intellectual, political, social or cultural deserts?  This week's parashah then teaches us that to go forth from the wilderness is more than a physical journey.  It is also a journey toward freedom of thought and expression.  In this manner, most Americans would agree that they or their ancestors left their personal deserts to find their personal promised land.

Much of American culture is build on Jewish principles.  From Judaism Americans have learned the importance of freedom of speech and individual thought.  Judaism is a religion that worries less about what one says  and puts its emphasis on what one does.  We Jews tend to judge a person by his actions.  These principles have greatly influenced American history and this nation's role in the world.  It is for this reason that the Bible and American culture demand that a nation's leaders tell the truth and present the principle  that a society based on lies is an empty society; one that in end is blown away by the sands of time.

The issue from the Bible's viewpoint is not if a government has the right to control its citizens' speech, it does not, but rather do a people's citizens use their right of free speech in a responsible manner.

The Book of Numbers teaches us that as a nation we must decide if we want a government where we doubt the veracity of our leaders or if we will demand that our leaders words match their actions. Do we desire truth or political spin?  How we chose will determine the next chapter in our nation's history.  Let us pray that we chose wisely.
--
B'shalom u-vrachah,
In peace and blessings,

Rabbi Peter Tarlow
TAMU Hillel Foundation

EL CRECIMIENTO NOTABLE DE JUDAÍSMO REFORMISTA EN ESPAÑA

Un enorme crecimiento en las 

comunidades judías de España


He estado yendo a España todos los años, desde 2008, con el fin de ayudar a la Comunidad Jueva Bet Shalom de Barcelona, una pequeña y naciente congregación reformista, con sus programas y servicios religiosos. En junio pasado, después de diez días en Turquía, Inés y yo hemos pasado dos semanas en Barcelona, participando en su historia y manteniendo actividades.

Mi programa diario estuvo lleno. He oficiado en tres bodas para los miembros del Templo, un Bar Mitzvah para una familia judía estadounidense (en su camino en un crucero por el Mediterráneo), impartí dos charlas en ATID, la otra congregación reformista en la ciudad de Barcelona, di una conferencia en un foro de tipo Skype como colofón del curso para el proceso de conversión, con el resto de las congregaciones progresistas en España (y dos clases sobre temas fundamentales del judaísmo*), he tenido numerosos encuentros con diversas personas, he liderado los servicios de la noche del viernes y de la mañana del sábado, y he tomado parte en las deliberaciones del Bet Din (tribunal religioso) envidado por Londres, que representó a la Región Europea de la World Unión para el Judaísmo Progresista (WUPJ), y en dos días hemos dado la bienvenida a 20 personas como judíos por elección (incluyendo la “tevilá”, la inmersión en el océano).

Franz Kafka

Un homenaje a un gran pensador


Hoy se recuerda los 130 años de su nacimiento.

Franz Kafka fue un escritor praguense de origen judío que escribió su obra en alemán. Su obra está considerada como una de las más influyentes de la literatura universal. Wikipedia 

Franz Kafka
(Praga, 1883 - Kierling, Austria, 1924) Escritor checo en lengua alemana. Nacido en el seno de una
familia de comerciantes judíos, Franz Kafka se formó en un ambiente cultural alemán, y se doctoró
 en derecho. Pronto empezó a interesarse por la mística y la religión judías, que ejercieron sobre
él una notable influencia y favorecieron su adhesión al sionismo.
Su proyecto de emigrar a Palestina se vio frustrado en 1917 al padecer los primeros síntomas
de tuberculosis, que sería la causante de su muerte. A pesar de la enfermedad, de la
 hostilidad manifiesta de su familia hacia su vocación literaria, de sus cinco tentativas
 matrimoniales frustradas y de su empleo de burócrata en una compañía de seguros de Praga,
Franz Kafka se dedicó intensamente a la literatura.



Su obra, que nos ha llegado en contra de su voluntad expresa, pues ordenó a su íntimo
amigo y consejero literario Max Brod que, a su muerte, quemara todos sus manuscritos, constituye
 una de las cumbres de la literatura alemana y se cuenta entre las más influyentes e innovadoras
del siglo XX.
En la línea de la Escuela de Praga, de la que es el miembro más destacado, la escritura de Kafka
se caracteriza por una marcada vocación metafísica y una síntesis de absurdo, ironía y lucidez.
Ese mundo de sueños, que describe paradójicamente con un realismo minucioso, ya se halla presente
en su primera novela corta, Descripción de una lucha, que apareció parcialmente en la revista
Hyperion, que dirigía Franz Blei.
En 1913, el editor Rowohlt accedió a publicar su primer libro, Meditaciones, que reunía extractos de
su diario personal, pequeños fragmentos en prosa de una inquietud espiritual penetrante y un
estilo profundamente innovador, a la vez lírico, dramático y melodioso. Sin embargo, el libro
pasó desapercibido; los siguientes tampoco obtendrían ningún éxito, fuera de un círculo íntimo de
amigos
y admiradores incondicionales.
El estallido de la Primera Guerra Mundial y el fracaso de un noviazgo en el que había depositado
todas sus esperanzas señalaron el inicio de una etapa creativa prolífica. Entre 1913 y 1919 Franz
Kafka escribió El procesoLa metamorfosis y La condena y publicó El chófer, que incorporaría más
adelante a su novelaAméricaEn la colonia penitenciaria y el volumen de relatos Un médico rural.

En 1920 abandonó su empleo, ingresó en un sanatorio y, poco tiempo después, se estableció en una
casa de campo en la que escribió El castillo; al año siguiente Kafka conoció a la escritora checa Milena
Jesenska-Pollak, con la que mantuvo un breve romance y una abundante correspondencia, no publicada
hasta 1952. El último año de su vida encontró en otra mujer, Dora Dymant, el gran amor que había
anhelado siempre, y que le devolvió brevemente la esperanza.
La existencia atribulada y angustiosa de Kafka se refleja en el pesimismo irónico que impregna su obra,
que describe, en un estilo que va desde lo fantástico de sus obras juveniles al realismo más estricto,
trayectorias de las que no se consigue captar ni el principio ni el fin. Sus personajes, designados
frecuentemente con una inicial (Joseph K o simplemente K), son zarandeados y amenazados por
instancias ocultas. Así, el protagonista de El procesono llegará a conocer el motivo de su condena a
muerte, y el agrimensor de El castillo buscará en vano el rostro del aparato burocrático en el que
pretende integrarse.
Los elementos fantásticos o absurdos, como la transformación en escarabajo del viajante de comercio
Gregor Samsa en La metamorfosis, introducen en la realidad más cotidiana aquella distorsión que permite
desvelar su propia y más profunda inconsistencia, un método que se ha llegado a considerar como una
especial y literaria reducción al absurdo. Su originalidad irreductible y el inmenso valor literario de su obra
le han valido a posteriori una posición privilegiada, casi mítica, en la literatura contemporánea.


Una comida campestre y una infusión




POR 
MARC J. ROSENSTEIN
Comentar en ReformJudaism.org

¿Quién es fuerte? El que conquista su inclinación al mal ... Y hay quien dice: El que hace a su enemigo en un amigo. 
    - Avot d'Rabi Natan A 23


Tuve un par de lo común, y muy diferente, experiencias dentro de unos pocos días de diferencia esta semana, que dio un impulso necesario a mi sionismo.
Viernes Galilea Circus (un circo entre judíos y árabes jóvenes con los que he estado involucrado durante los últimos diez años) celebró su picnic anual de la familia. No es gran cosa. 80 personas, los padres, los niños de todas las edades, y algunos abuelos, llevaron junto a un bosque de sombra con mesas de picnic y una fácil ruta de senderismo a lo largo de una corriente fría. Mientras que uno de los padres llevaron una caminata, un grupo de padres de familia se quedó atrás en la zona de picnic para cortar verduras y establecer el humus y ensaladas, y falafel freír más de un quemador de gas portátil. Los excursionistas regresaron, feliz y, en muchos casos, mojado, y todo el mundo hacían cola para llenar sus platos y encontrar un lugar en la mesa durante mucho tiempo que se había establecido, o en las esteras que habían sido repartidas, los niños mayores con sus amigos , los más pequeños, con sus padres. Un tipo corriente, universal de la escena - podría haber sido una pintura de Norman Rockwell de un pequeño picnic vacaciones ciudad. Excepto que Norman Rockwell no pintaba árabes (o Judios, probablemente, tampoco). El pueblo lo que, naturalmente cortar pepinos y discutiendo sobre el número de bolas de falafel - y persiguiendo a sus hijos en todo el merendero - y bromeando con sus compañeros - todos eran israelíes, pero comprendían dos poblaciones que viven en comunidades separadas, asisten a escuelas separadas, hablan diferente lenguas maternas, representan las diferentes culturas, y albergan muy diferentes sentidos de la identidad y la memoria colectiva. Para muchos de ellos esta era una experiencia nueva, para muchos otros, fue una experiencia de una vez al año. Y estoy seguro de que todos eran conscientes del hecho de que probablemente el 99% de sus familias y amigos y vecinos nunca había tenido tal experiencia. Esa conciencia añadieron una medida adicional de alegría para los procedimientos. Fue un día de campo - bien organizado, diversión, en un lugar precioso, pero comprendió que era más que eso.
Unos días más tarde, desarrollé una infección que necesita una infusión de antibióticos, mientras trabajaba en Jerusalén, así que fui a una clínica de atención de emergencia frente a la tienda que sirve a todas las HMO (en Israel todo el mundo pertenece a un HMO, con la adhesión financiado por el gobierno y una modesta deducción de nómina requerido). El lugar estaba animado con todos los tipos de casos que se esperan, desde el molesto para el miedo. Los ocupantes de las sillas en la sala de espera representan una sección transversal completa de Israel: los árabes y los Judios, ultra-ortodoxos y seculares, viejos y jóvenes, yuppies y los trabajadores, todo el mundo solo con su / su propio sufrimiento, todo el mundo consciente de que ese mismo sufrimiento creado una identidad compartida por todos nosotros: simplemente seres humanos. El personal médico y de apoyo, también, era una imagen de toda la diversidad de la sociedad israelí - secretarias, enfermeras, médicos, productos de limpieza - de todos los sectores étnicos y religiosos. Ha sido mi observación en el pasado de las visitas a los hospitales y clínicas, como un visitante o un paciente, que esto es típico de todo el sistema de atención médica aquí, del centro a la periferia y de arriba a abajo. Realmente es ciega a la etnicidad y la religión. De vez en cuando uno tiene una experiencia que nos permite ver la realidad de cerca, bajo presión. Supongo que es algo que deberíamos dar por sentado, pero todavía me resulta increíble, mover y animar.
Así que resulta que realmente podemos jugar juntos, comer juntos, sufrir juntos, y sanar juntos. ¿Cuándo vamos a encontrar la manera de vivir juntos?

¡Ojo con el botón de avance rápido!


Seminario Rabinico Latinoamericano



Recuerdo aquél día en el que junto a Johanna, mi esposa, recibimos por fin el video editado de nuestro casamiento. Con mucha emoción colocamos la cinta en el reproductor de videos (sí, hace once años se grababa todavía en videocasetes) y juntos revivimos cada momento de aquél maravilloso día. Aún conservo fresca la sensación de ansiedad por mostrárselo de principio a fin a cada uno de nuestros amigos. Por fin, en grupitos, fuimos juntándolos para compartir nuestro más preciado recuerdo. El desenlace era previsible: A los pocos minutos el primero de ellos comenzó a bostezar, luego otro, y otro más. ¡Ya para la segunda tanda de baile estaba cada uno enfrascado en su propia conversación! Entonces llegó la acción liberadora que todos, sin decirlo, estaban esperando: Presioné el botón de avance rápido, me conformé con mostrar un pantallazo general de la fiesta y avanzar directamente a lo “importante”, salteando así las partes “aburridas”.

  • ¡A quien no le pasó esto alguna vez algo así! Sucede que somos la generación del zapping; nos cuesta estar mucho tiempo haciendo lo mismo y sostenemos que en la vida todo tiene que ser abreviado, resumido y sumamente acotado.
    Sucede que con esos mismos ojos de apuro, intentamos una y otra vez leer la Torá. Ciertos pasajes son muy llevaderos y sus historias de vida nos hacen pensar. En ocasiones se nos relata episodios que nos quedan muy lejanos en el tiempo pero que de todas formas despiertan nuestra atención. Pero otras veces sentimos la tentación de saltear capítulos donde la Torá se vuelve sumamente detallista y puntillosa. Un ejemplo de esto lo encontramos en Parashat Masei, la última del cuarto libro de la Torá, llamado Bemidbar. Al comienzo de nuestra parashá, el texto enumera uno a uno los lugares por los que el pueblo de Israel pasó – y acampó – en su travesía por el desierto desde el éxodo hasta la Tierra de promisión. En casi todos los casos, se describe a un Am Israel que se levantó de donde estaban y acampó en otro lado. Una y otra vez, contando incluso algún dato que en dicho lugar haya sucedido. Suena aburrido, reiterativo y descriptivo hasta la médula.
    Siendo que la Torá dedica solo 34 versículos a la Creación del Mundo, ¿Cómo se explica que se destinen 49 a la descripción de las estaciones?
    Maimónides (España-Egipto, siglo XII) afirma que las paradas se encuentran detalladas para que las generaciones futuras conozcan todos los milagros que el Kadosh Baruj Hu generó en el desierto marcándole al pueblo el camino correcto. En consonancia, Ovadiá Seforno (Italia, siglo XVI) supone que este detalle hace pensar en el mérito de aquella generación caminando tras los pasos de Dios en una tierra árida como lo es el desierto, con el objetivo de llegar en algún momento a la tierra de Canaán. Por su parte, su contemporáneo italiano, el rabino Abraham Menajem Rapa sostiene que fueron escritos para que, cuando cualquiera de nosotros pase hoy por alguno de estos lugares, diga: “Bendito aquél que hizo un milagro para nuestros padres en este lugar” (basándose en un pasaje del Talmud de Babilonia en Brajot 9a).
    Sea como fuere, pareciera ser que ninguno de estos versículos tiene una enseñanza intrínseca y la tentación nos alienta a presionar el botón de avance rápido, saltar esta larga descripción y llegar así a la parte “importante” de la Parashá.
    Sin embargo, estas 42 paradas son mucho más relevantes de lo que pudiéramos imaginar. Tanto, que los sabios post talmúdicos dictaminaron que así como fueron 42 las estaciones en las que el pueblo acampó, también sean 42 los renglones que disponga cada columna de un rollo de la Torá (Sofrim 2, 11). Si bien existen otras opiniones al respecto (véase por ejemplo Mishné Torá, Hiljot Sefer Torá 7, 10), hoy en día prácticamente todos los Sifrei Torá se escriben en columnas de 42 renglones, uno por cada una de las estaciones en las cuales acamparon nuestros antepasados.
    Son muchas las razones, pero especialmente me convence una: Así como cada lugar formó, forjó, templó, movilizó y enseñó algo a aquella generación, así debiéramos preguntarnos – en forma simbólica, antes de pasar de un renglón a otro – qué se puede aprender de las palabras que acabo de leer. De la misma forma que cada parada fue necesaria para llegar a destino, así también cada letra de la Torá guarda un mensaje para llenar el alma. Llevado a nuestra vida cotidiana, cada individuo es producto de su vida, de su historia. Aún aquellos momentos que se quisieran acelerar, son parte de un aprendizaje que, a la larga, te llevarán a la Tierra de promisión, a tu experiencia y a tu propio destino.
    Cierta vez alguien me enseñó que las personas queremos avanzar rápido para crecer antes de tiempo, y siendo adultos buscamos tener a mano el botón de retroceso para volver a ser chicos nuevamente en caso de necesidad. Lo veo con mis hijos, y lo siento en carne propia cada día. Quizás la clave resida en valorar cada momento tal cual es, invertir los contados años en una vida significativa, y antes de pasar al renglón siguiente, preguntarnos: ¿Qué aprendí hoy aquí?
    Seminarista Sebastián Grimberg — con Sebastián Grimberg